Por Charro Virtual

Finaliza un campeonato que tuvo de todo, en exceso, pero de todo, desde polémica por yeguas muy pequeñas en etapa  eliminatoria pero que mejoró de manera más que evidente  en semifinales.

Para las finales un excelente ganado para todas las suertes, buena presencia en piales, colas, de reparo y de paso de la muerte.

Se notó que trabajaron muy poco a las yeguas de manganas y hubo muchas fallas en ese rubro, pero al final son suertes charras y nada está escrito.

Un escenario más que digno de un campeonato nacional; a muchos no les agradó que hubieran cuatro competencias por día, a unos cuantos si.

La reventa de boletos es un mal que ha rebasado a los comités organizadores.

La información fluyó de manera muy espaciada, con ello se demuestra que esta administración no requiere de muchos medios de información en los lienzos (es uno de los Campeonatos con menos medios de comunicación de la prensa especializada haciendo acto de presencia, pero eso no le preocupa a Toñote, mientras tres o cuatro medios lo alaben se siente feliz.

El punto neurálgico del campeonato fueron jueces femeniles y masculinos, los mejores críticos serán los aficionados del deporte más mexicano, ya que a través de las redes sociales se dejaron sentir con sus molestias a través de comentarios que fueron regulados, eliminados y bloqueados por personal de federación, intentaron tapar el sol con un dedo, pero la afición olvidará muy pronto, la afición desea charrería después de dos años una inactividad que a todos nos asustó y que todavía no alcanzaremos a superar y tan fácil.

La afición merece un presidente que cumpla representando a la charrería y no a unos cuantos, demostrar que le interesa el deporte y a los que nos gusta este bello deporte nacional.

Los medios y cronistas deportivos echaron las campanas al vuelo por qué hubo 45 000 dispositivos conectados y cerca de 100,000 gentes viendo la final a través de redes sociales (Facebook y YouTube) y 7,500 en la arena San Marcos, mientras que un solo partido de solo dos horas entre Toluca y Pumas tuvo un aforo presencial de 30,000 personas y más de medio millón de aficionados viendo ganar a Pumas; la estrategia de difusión en federación mexicana de charrería es, ha sido y será paupérrima, irrisoria y sobre todo engañosa para nosotros mismos; es el deporte nacional, pero en la calle aún te siguen confundiendo con mariachi, te piden canciones cuando vas de charro.

Se necesita un presidente que vea una proyección mundial del deporte y que todo México se interese y sepa que es un charro.

Termina un campeonato nacional que quedará marcado por una descalificación femenil por haber levantado la voz con pruebas, con sustento, se castiga al elenco femenil por exigir sus derechos y eso no se olvidará tan fácil.

La justicia requiere ser independiente de la presidencia de la fmch y con ello absorber sus yerros, hay tanto por hacer y poca disposición para hacerlo.

Hay tanto todavía que decir y mientras ustedes lo permitan, lo seguiremos externando, gracias por aburrirse leyendo,  es el inicio de una serie de análisis que pretendemos compartir con ustedes, gracias por todo lo que nos han mandado, lo subiremos y retomaremos el estilo que habíamos dejado en la calma, gracias de nuevo a los que gustan de la polémica y gracias también a los que no les agrada lo que se estará escribiendo, gracias a ustedes hay mucho de lo cual hablar y debatir, buenas noches, buenos días, buenas tardes.

PRIMERA PARTE, DE NO SABEMOS CUANTAS PARTES