Lunes 19 de septiembre de 2022
José Narro

Vivimos en una nación diversa, rica en cultura y tradiciones. Desde Baja California hasta el sureste y la península de Yucatán la diversidad es un rasgo que nos caracteriza. Música, cultura, tradiciones, comida, bebidas, baile y vestimenta nos identifican aún en la diversidad. Todas esas expresiones y formas de concebir al mundo conforman a nuestro México.
Septiembre, el mes de la patria, es significativo cuando hablamos de nuestra identidad nacional y si reflexionamos en torno a esa identidad, llama la atención que una de las tradiciones que nos representan como México ante el mundo es la Charrería.
¿Algunas vez se han preguntado por qué en cualquier parte del mundo donde se aprecie la figura de una persona con sombrero de ala ancha, bigote, traje adornado con botonadura y botas representa a México?
La charrería se ha consolidado como el deporte nacional mexicano, el rasgo que nos identifica ante el mundo, el símbolo de la mexicanidad. Las charras y los charros mexicanos hoy son referentes mundiales y un signo que nos distingue como mexicanos. La música, el tequila y la presencia en la época de oro del cine mexicano de los Charros enamorados, cantadores, valientes, jugadores y entrones, posicionaron la imagen de la charrería como signo del mexicano afianzado a la tierra a nivel mundial.
Naturalmente, en el mes de la patria celebramos el Día del Charro. El 14 de septiembre el presidente Manuel Ávila Camacho declaró a la Charrería como el Deporte Nacional. Hoy la charrería es Historia, tradición, cultura, vida y deporte. Sus orígenes los encontramos en el trabajo en el campo, para arrear al ganado bovino en las grandes haciendas de nuestra patria.
El traje responde a las necesidades en la labor diaria de los llanos: sombrero de ala ancha para cubrirse del sol, “pedradas” (hendiduras) en la copa para darle fuerza a la estructura y volverlo resistente en caso de alguna caída del caballo. Camisa de manga larga, pantalón ceñido y botines para acomodar los pies en los estribos de la silla de montar. Adicionalmente las chaparreras de gamuza para proteger las piernas y espuelas en los talones para el correcto manejo de nuestro inseparable compañero, el caballo.
¿Qué es la charrería? ¿Es deporte, arte, artesanía, cultura, tradición, orgullo, patria? la Charrería tiene la maravillosa virtud de conjuntar en ella todas estas virtudes. Ya lo dice el muy conocido verso de la poesía charra: Vestirse de Charro, es vestirse de México. Nosotros sostenemos que vestirse de Charro es vestirse de amor a la patria, de amor a nuestras raíces, a nuestra identidad.
Nos sentimos muy orgullosos de ser mexicanos, de defender a nuestra patria, a nuestras raices y cada vez que nos vestimos de charro, nos vestimos de defensores de México. Hoy en el día del charro, celebramos a todas y todos los hombres de a caballo, mujeres y hombres que se sienten orgullosos de pertenecer a esta tierra mexicana.
Hoy en el Día del Charro, hacemos valer y compartimos la palabra del poeta charro mexicano Delfín Sánchez Juárez,
Que no se acabe nuestra raza de hombres de a caballo….
Es la esencia de la tierra, es el grito campirano
El símbolo de la historia, es el centauro, es el charro
Vendaval que barre el viento de sierra, de costa y de llano.
Cuatro puntos cardinales dan variantes a su garbo;
son todos uno solo, es uno en cada recuadro.
Los siglos en él se pierden, en él se olvidan los años
pasan las generaciones sin estridencias, sin cambios;
mantienen sangre y arreos, lo que cambia es el caballo,
más fuerte, mejor plantado.
